LA CONTAMINIACIÓN LUMÍNICA, EN AUMENTO POR EL USO DE BOMBILLAS LED

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Una investigación publicada en Science Advances revela que la popularización de las bombillas LED de ahorro de energía está aumentando la contaminación lumínica en todo el mundo. De acuerdo con las conclusiones de los científicos, esto podría tener consecuencias nefastas para la salud de las personas y los animales, factores que para mí, un estudiante del bachillerato científico me interesan en gran medida.

Las bombillas LED llegaron como una revolución en el ámbito de la iluminación. Poco a poco han ido sustituyendo a las incandescentes, cuya fabricación se prohibió el 1 de septiembre de 2012, ya que ofrecen grandes ventajas: consumen cinco veces menos, dan más luz con el mismo consumo y su duración es mayor, argumentos expuestos que se pueden apreciar claramente reflejados en datos estadísticos y de experiencia personal.

No obstante, no todo son beneficios. Según los estudios obtenidos en una fiable Universidad, las bombillas LED hace que las noches en nuestro planeta sean cada vez más brillantes, una circunstancia que pone en peligro la vida de muchas especies animales y que también ocasiona problemas de salud a los seres humanos. Los médicos afirman que las luces nocturnas interrumpen nuestros relojes internos y aumentan los riesgos de padecer cáncer, diabetes o depresión.

El estudio se basa en datos satelitales obtenidos en los últimos años mediante un radiómetro especialmente diseñado para las luces nocturnas. Las mediciones muestran que las superficies iluminadas de manera artificial durante la noche crecieron a un ritmo del 2,2% anual entre 2012 y 2016. El informe revela que España, junto con Estados Unidos, Italia y Países Bajos, se encuentra entre las zonas más brillantes del mundo durante la noche. (argumentos de cifras y datos estadísticos con la adición de comparación entre países de Europa.)

El equipo explica que el problema se debe a que se están instalando más y más luces en todo el mundo sin ningún control, una práctica que se ha visto favorecida por la eficiencia de las luces LED. Los países de todo el mundo están sustituyendo la iluminación de las calles por bombillas LED, pero se están reemplanzado unas por otras sin analizar cuáles son las necesidades que cada sitio. Además, algunas comunidades invierten el ahorro energético en la instalación de más luces.

Para ponerle remedio a este problema creciente, los científicos proponen concienciar a la población de los inconvenientes de la iluminación nocturna para que se use cuando sea exclusivamente necesario. Otras soluciones pasan por la instalación de sensores de presencia o de usar bombillas de color ámbar en lugar de azul o violeta para no atraer a los insectos.